La región de la Lombardía italiana comprende la zona nordoeste de Italia, aquella que limita con Francia por la derecha y Suiza por el norte. Una región próspera con suelo fértil, un clima templado y, con grandes lugares de ocio para el turista, como los espectaculares lagos di Como, Garda o Maggiore (compartido con la región de Piamonte), que se extienden en una serie de valles largos, profundos a los pies de los Alpes. Lamentablemente, por falta de tiempo, no pudimos visitarlos todos pero sí dos de los más grandes: Como y Garda
Para conocer bien y no perderse nada de la Lombardía, lo ideal y más cómodo como transporte es el coche. Con él no dependeremos de horarios de trenes ni autobuses y podremos realizar todas las paradas que queramos allí donde deseemos. Incluso podremos acceder a lugares a los que no podríamos con autocar o viajando en avión a una ciudad concreta. El coche nos ofrece total libertad de movimientos.
Y como a nosotros nos encanta la libertad eso hicimos. Nos montamos en nuestro coche y como suele decirse: carretera y manta. Salimos de Barcelona dirección Milán. Nuestra intención era visitar toda la zona norte de Italia a nuestro aire y planificarnos excursiones diarias.. Sin apenas realizar paradas durante el trayecto, llegamos a primera hora de la tarde a Milán y ese mismo día visitamos el centro de la ciudad: el Duomo, la Galeria Vittorio Emanuele y El Castello Sforzesco. La verdad es que la impresión que nos dio Milán (sin ánimo de ofender) fue la de una ciudad poco cuidada, con unos edificios sucios por el paso de los años y la contaminación. Así que, dada la ciudad por vista, al día siguiente decidimos ir a la zona de los lagos y, concretamente, visitar y explorar el lago di Como.
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